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LA CINEMATECA BRASILEIRA —Un archivo en Emergencia

La Cinemateca Brasilera tiene bajo su cuidado la colección audiovisual más grande de América Latina, cuya preservación requiere atención permanente por parte de técnicos especializados y el mantenimiento de estrictos parámetros de conservación a baja temperatura y humedad relativa, ya que el material de muchos de estos rollos es altamente inflamable.

Desde el 31 de diciembre de 2019, cuando finalizó el contrato de la Organización Social —ACERP— que gestiona la Cinemateca, el gobierno brasileño no ha convocado nuevas licitaciones y desde junio de 2020, representantes del Estado han tomado las llaves del edificio que se encuentra cerrado desde entonces. Finalmente, en agosto de este mismo año la Organización Social ha despedido a todo su equipo técnico. Son 150 trabajadoras y trabajadores que desde meses anteriores ya estaban sufriendo la suspensión de recursos, incluso de sus propios sueldos y a pesar de ello, seguían asistiendo a cumplir las funciones básicas para proteger estas memorias. Pero ahora, imposibilitados para acceder al edificio, todo el acervo está corriendo grave riesgo de deterioro, lo que nos hace preguntarnos:

¿Es realmente posible y deseable borrar nuestro pasado, nuestra memoria, este conjunto de imágenes y documentos que hace nuestras miradas interminables? ¿Qué significa hacer desaparecer de la historia del cine las obras conservadas y la existencia de la Cinemateca Brasileira que ha alcanzado un innegable reconocimiento en Brasil y en el mundo? Fundada en 1940, la Cinemateca Brasileña preserva nuestra memoria. Son 250 mil rollos de películas y aproximadamente 1 millón de documentos en emergencia. Resonamos aquí todos los núcleos y sectores de la Cinemateca, todas sus actividades y programas, todas las trabajadoras y todos los trabajadores sin los cuales no se conserva la memoria.  

 

Límite, Mário Peixoto, Brasil, 1931, 120'

Restaurado por la Cinemateca Brasileira y The Film Foundation | World Cinema Project en asociación con Arquivo Mario Peixoto, Saulo Pereira de Mello y Walter Salles. El escaneo fue realizado por la Cinemateca Brasileira y, en 2012, la Cineteca di Bologna a través de su laboratorio L'Immagine Ritrovata finalizó el trabajo de restauración de la película.

Fondos de restauración suministrados por Armani, Cartier, Qatar Airways y Qatar Museum Authority.

La única película concluida por Mário Peixoto, Límite es considerada una de las obras más importantes en la historia del cine brasileño. Extremadamente innovadora para su época, es una inspiración directa del cine soviético, del expresionismo alemán y del cine clásico de Griffith, profesando una visión del cine como arte.

Hoy en día, su importancia es ampliamente reconocida, ya que generó una gran innovación en términos de lenguaje, con su ritmo lento, planos del paisaje brasileño y un trabajo de cámara revolucionario, que alterna fotogramas estáticos con movimientos más vertiginosos acompañados de música clásica.

En 1988, Límite fue elegida, en una encuesta nacional promovida por la Cinemateca Brasileira entre los críticos de cine más importantes de Brasil, la mejor película brasileña de todos los tiempos. También sido reconocida por el Comité del Programa «Memoria del Mundo» para América Latina y el Caribe de la UNESCO.

El 17 de mayo de 1931 se estrenó Límite en el Cine Capitolio de Río de Janeiro. Y este 2 de diciembre de 2020, a las 18h, tendremos la oportunidad de verla proyectada en el Cine 1 de Tabakalera.

 

Sinopsis

Un tema, una situación y tres historias. El tema, el anhelo del hombre por el infinito, su clamor y su derrota. La situación, un barco perdido en el océano con tres náufragos, un hombre y dos mujeres. Las tres historias son las que los personajes se cuentan mutuamente. En la situación se perfila el tema que desarrolla las tres historias. La tragedia cósmica ocurre en el barco, hacia donde las historias convergen. Los náufragos están abatidos, ya han dejado de remar y parecen resignados a su destino.

 

Mário Peixoto

Mário Breves Peixoto nació el 25 de marzo de 1908. Como muchos artistas brasileños de su tiempo, Peixoto fue profundamente influenciado por los movimientos artísticos europeos. A los 19 años de edad tomó interés en la actuación durante sus estudios en Gran Bretaña. Lo que era un pasatiempo para Peixoto le motiva a un profundo aprecio por el cine y por las técnicas formales más estilizadas. Peixoto se quedó especialmente impresionado por el montaje ruso y el expresionismo alemán, particularmente admiraba el trabajo de directores como Fritz Lang, Georg Wilhelm Pabst, F. W. Murnau, Ernst Lubitsch, Sergei Eisenstein y Vsevolod Pudovkin. No por coincidencia, su única película, Límite (1931) fue aprehendida por la Policía de la Dictadura Militar de Brasil en 1966 junto con las películas La madre (1926) de Vsevolod Pudovkin y Acorazado Potemkin (1925) de Sergei Eisenstein.

Al regresar a Río de Janeiro después de completar su educación en Gran Bretaña, Peixoto se volvió cada vez más involucrado en la floreciente escena artística local. Al sumergirse en el paisaje cultural de Río de Janeiro, se hizo amigo del cámara y director de fotografía Edgar Brasil y del director Adhemar Gonzaga, asistiendo el rodaje de Barro Humano (1927). Peixoto también encontró un amigo en el crítico y escritor Octávio de Farias. Farias era miembro del Chaplin Club, un grupo de cinéfilos fundado en 1928 que publicó una influyente revista llamada The Fan hasta 1930, que se dedicaba a debates sobre la estética del cine mudo.

Peixoto consideró que la disponibilidad de películas en Brasil era limitante y regresó a Europa el año siguiente con el propósito de ver películas que no eran accesibles en Brasil.

La inspiración de Peixoto para Límite provino de una fotografía de André Kertesz que él encontró en agosto de 1929 en su segundo viaje a Europa. La imagen, publicada originalmente en Vu, una revista francesa dedicada a la fotografía, mostraba a una mujer abrazada por un hombre llevando esposas. Peixoto escribió un tratamiento para Límite basado en la inquietud de la fotografía de Kertesz, y recreará la imagen para las secuencias de apertura y cierre de su película.

Luego de su regreso a Brasil, Peixoto presentó el tratamiento a los directores Adhemar Gonzaga y Humberto Mauro, pero ambos aconsejaron a Peixoto que filmará la película él mismo. La preproducción comenzó el año siguiente y el 17 de mayo de 1931 se estrenó Límite en el Cine Capitolio de Río de Janeiro.

 

Sesión programada por Renan Camilo, Paula González y Valery Rojas, estudiantes de Comisariado de Elías Querejeta Zine Eskola. 

Descripción Corta

Después de un naufragio, un hombre y dos mujeres están a la deriva en un bote de remos sin esperanza de ser rescatados.

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"Límite", Mário Peixoto, Brasil, 1931, 120'
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