Durante tres días aprenderemos qué efecto tiene el calor en la comida, diseñaremos y fabricaremos un dispositivo de cocción a baja temperatura y, por último, degustaremos los productos que se pueden hacer con este dispositivo.
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Uno de los descubrimientos más importantes de la historia de los homínidos fue cuando, hace cosa de millón y medio de años, aprendimos a controlar el uso del fuego. El dominio de esta tecnología básica provocó grandes cambios en el comportamiento de los humanos: la actividad ya no quedaba restringida a las horas diurnas, algunos mamíferos e insectos evitaban el fuego y el humo y, sobre todo, el fuego permitió transformar los ingredientes dando un resultado más digerible y contribuyendo a que los humanos absorbieran más calorías.
Igual que hicimos el año pasado en el taller de Fermentación, este taller servirá para entender la tecnología alimentaria y su uso. En el transcurso de tres días, aprenderemos qué efecto tiene el calor en la comida, diseñaremos y fabricaremos un dispositivo de cocción a baja temperatura y, por último, degustaremos los productos que se pueden hacer con este dispositivo.
Al equipo de Food Hack Lab se sumarán para esta ocasión los expertos Rocío Maeso y Ander Rodriguez, graduados en Gastronomía y Artes Culinarias por el Basque Culinary Center y profesionales de amplia experiencia en restaurantes de alta cocina que actualmente son responsables del espacio gastronómico de un hotel de próxima apertura en Donostia.
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