El trabajo que planteo hacer durante la residencia es el de seleccionar, organizar, maquetar y editar las imágenes y los textos para un libro y una pieza fílmica que parten del mismo origen, un recorrido: la caminata que voy a realizar desde Madrid hasta Donostia/San Sebastián. El mismo surge de la necesidad de cruzar fronteras, del impulso de poner el pensamiento en acción y de practicar una forma de resistencia en varias de sus acepciones: la capacidad que tiene el cuerpo de “soportar” y el valor político y ético de no claudicar, de violentar el letargo, de resistir en el sentido que Deleuze señaló: ¿Cuál es esa relación misteriosa entre una obra de arte y un acto de resistencia? Malraux dice algo muy sencillo sobre el arte. Dice, “es lo único que resiste a la muerte”. El arte es lo que resiste. Esta caminata evoca hechos del pasado, se afinca en referencias y también responde a situaciones políticas actuales que nos agreden, que afectan los cuerpos y subrayan las diferencias y la precariedad económica generadas por sistemas de control y de producción que han vulnerado las premisas del bienestar social.