LUCE

Valencia 1989. Mi primera relación con el espacio público fue a través del graffiti y la escritura del nombre, escribirlo cuantas más veces mejor y en la mayor cantidad de lugares posibles. Después de un tiempo, empecé a cuestionarme cómo hacerlo, a qué horas, dónde... hechos con los que iba conociendo la ciudad en la que vivía. Las cuatro letras que utilizo, L U C E, empiezan a entenderse de manera distinta en el contexto del graffiti por el hecho de utilizar herramientas para escribirlo, rectángulos de madera utilizadas como plantillas, generaron gran legibilidad. Las variaciones que se produjeron en las plantillas fueron dadas por su uso, es cuando se produce un acercamiento al objeto y a un material como la madera. Trabajar el volumen me generó mayor integración con el espacio y fomentó mi creatividad. Hoy por hoy, prevalecen ideas en las cuales no aparece escrito LUCE desapareciendo para generar nuevas libertades con el espacio y a la vez crear vínculos con el fin de generar nuevos diálogos