Los exiliados románticos es una película sobre tres amigos y un viaje: Madrid, Toulouse, París, Annecy... También una película sobre las relaciones amorosas que han sido o que podrían haber sido. Y la música de Miren Iza (Tulsa) acompañando este viaje de final de verano.
Los exiliados románticos
Empecemos por el final, por un cartel en los títulos de crédito que dice: “Película rodada sobre la marcha en Madrid, Toulousse, París y Annecy, a finales de agosto y principios de septiembre de 2014, más basada en ciertos ideales que en hechos reales... Blaise Pascal dijo: ¿Qué importa que el placer sea falso si se está persuadido de que es verdadero?”.
Ahora vamos al principio, a la cita que da título a todo esto, también escrita sobre la pantalla, un apunte del británico Edward Hallett Carr en su libro Los exiliados románticos: “El romanticismo abarcó todos los aspectos del pensamiento humano. Se extendió por toda Europa, floreció, decayó y finalmente desapareció. Aunque con algún brote esporádico en años posteriores”.
Entre estas dos citas, hay una película. Del romanticismo al placer. Un verano. Un viaje en furgoneta hacia el norte. Tres personajes. Luis, Vito, Fracesco. Tres encuentros. Tres amigas: Renata, Isabelle, Vahina. Una cantante, que es también un personaje misterioso: Miren Iza, más conocida como Tulsa. Esto es una película sobre carreteras. Sobre bares. Sobre dormir en furgonetas. Sobre estaciones de servicio. Sobre la luz, la buena luz de agosto. Sobre ese momento en el que un bar nos dicen que ya se puede fumar. “Ya puedes fumar”, que no es más que un aviso de que ya se ha hecho de día, de que todo ha terminado. Esto es una película sobre orillas: de carreteras, de ríos, de autopistas, de uno mismo. Una película en varios idiomas: en italiano, en inglés, en alemán, en francés... Y una vez más, como sucede con otros trabajos de Jonás Trueba, esto es una película sobre leer, sobre los libros, sobre recordar frases de libros, sobre contar a alguien algo que hemos leído: Natalia Ginzburg, por ejemplo. Esto es una película sobre el paisaje: los árboles, los pájaros, las nubes. Esto es una película sobre les sucede a estos tres jóvenes por dentro mientras atraviesan ese paisaje, esos árboles, esos pájaros, esas nubes. Del romanticismo al placer: lo que les sucede por dentro. El verano: lo que les sucede por dentro. Los finales: lo que les sucede por dentro. La luz, otra vez la buena luz de agosto: lo que les sucede por dentro.
Esto es una película que a veces nos recuerda a otras películas (Rohmer, por ejemplo) y que a veces nos recuerda a nuestra propia vida: aquel verano, aquel encuentro, aquel baño en un lago, aquel final... Como si esto fuera una película-canción, como si todas las canciones siguieran hablando de nosotros.
2 de octubre, Cine Tabakalera, 22:00* con presencia de Jonás Trueba.
24 de Octubre, Cine Tabakalera, 19:00
7 de noviembre , Cine Tabakalera, 19:00
Documentación
Proyección de la película de Jonás Trueba.