Las emociones han jalonado la historia de la humanidad y, por ende, la historia política. En la Bizkaia industrial de 1890, una serie de emociones se aliaron con un planteamiento político novedoso en la época, el socialismo, y dieron lugar a uno de los procesos históricos más relevantes de nuestra modernidad, el movimiento obrero. Esta charla mostrará cómo la superación del miedo, la resistencia a ser categorizados a través de asco y como animales, el amor dentro de la familia o la solidaridad, fueron, junto con la propuesta programática socialista, elementos constitutivos de ese proceso político.
Desde la eclosión de la segunda ola del feminismo a finales de los años sesenta, la teoría de género y sus praxis activista y artística han venido acompañadas por una filosofía de la emoción -una “sensología alternativa”, en términos de Mario Perniola- que ha revalorizado algunos ámbitos del sentir y ha resituado algunos otros, proponiendo una lógica del sentimiento que toma elementos del psicoanálisis, de la sociología y de las técnicas autobiográficas y memorialísticas. “Allí donde veo que hay una represión, voy a por ella”. La frase de Carolee Schneemann nos servirá como punto de partida para esta exposición.
Conferencia de Sara Hidalgo y Eloy Fernández Porta