Este programa, basado en una serie de encuentros mensuales, pretende abrir un debate sobre estos temas. ¿Dónde empieza y termina la lista de las diferentes capas que debería tener en cuenta la ecología contemporánea?
El vocabulario que aborda cada época histórica es una muestra de los problemas y retos a los que se enfrenta la sociedad en ese momento. De ese modo, las formas de hablar y nombrar se convierten también en parte de los problemas a los que apuntan. Con todos sus claroscuros, esa denominación se encuentra atravesada hoy por la ecología, afectando igualmente a nuestros diccionarios y formas de vida.
A principios de la década de los 90, el filósofo Félix Guattari analizó la cuestión ecológica diferenciando tres estratos que estarían interrelacionados: la ecología psíquica, la ecología de las relaciones sociales y la ecología medioambiental. Desde entonces la ecología no ha hecho más que multiplicarse. La idea de que la sociedad está permanentemente comunicada con su entorno natural -en un ecosistema- ha llevado a extender la denominación a todas las direcciones: a las sensaciones, las percepciones, la cognición, el deseo, el ámbito de la atención, las relaciones de poder, los valores e incluso el ámbito de la información.
Este programa, basado en una serie de encuentros mensuales, pretende abrir un debate sobre estos temas. ¿Dónde empieza y termina la lista de las diferentes capas que debería tener en cuenta la ecología contemporánea? ¿Cómo podemos acercarnos al núcleo de estas capas? ¿Cómo y dónde se tocan? ¿Cómo impulsar, sin renunciar cada uno a su actividad, la preocupación y la responsabilidad por un espacio común? Tabakalera considera imprescindible tratar de responder a estas preguntas de forma colectiva. Produciendo enunciados críticos en relación con la práctica artística, las ciencias naturales y otras áreas de conocimiento e intervención pública.