Se trata de un proyecto centrado en las minas de Arditurri, situadas al este de Donostia/San Sebastián, entrelazando su mediación histórica con novedosos procesos de imagen por ordenador empleados en el ámbito de la arqueología digital, que fusionan representaciones de la mina con tecnologías de minería de imágenes.
Para ello, ahondaré en la historia del lugar, tanto superficial como subterránea, a través de su superposición en un contexto cultural y político más amplio, incluyendo representaciones previas en la Filmoteca Vasca. Junto con esa petrografía cultural, quisiera llevar una serie de novedosos procesos de imagen al terreno, para propiciar un encuentro entre la memoria cultural de esta zona de geología industrial y su representación digital y parafotográfica.
Todo ello forma parte de mi continuo interés por hallar nuevas formas de deconstruir el formato del ensayo cinematográfico en formas no lineales, a partir de mi investigación sobre la reciprocidad entre el cine y la arquitectura en las interrogantes de la historia.