El ciclo dedicado a Luis Buñuel que se está celebrando a lo largo del año 2021 en TBK, dentro de la programación Nosferatu, llegará a su final en diciembre. Un ciclo apasionante que ha recorrido la obra completa del cineasta de Calanda en orden cronológico y que ha permitido a las espectadoras y espectadores volver a encontrarse en una pantalla grande con los clásicos de su filmografía y sin duda descubrir títulos menos conocidos.
La retrospectiva se retoma este otoño con una de sus películas más importantes, Viridiana (1961), considerada casi por unanimidad una de las mejores películas españolas de la historia, pues precisamente supone la vuelta del cineasta de Calanda a su país de origen para rodar un film casi treinta años después. Y vuelve gracias al esfuerzo de, entre otros, Ricardo Muñoz Suay y Pere Portabella, que tras arduas negociaciones con las autoridades consiguen que don Luis vuelva a filmar en España. Y lo hace y lo demás ya es historia (o leyenda): el tira y afloja con la censura, Lola Gaos y la última cena, la Palma de Oro en Cannes, el tute y la prohibición.
De vuelta en México rueda otros dos clásicos, El ángel exterminador (1962) y Simón del desierto (1965), historias de personajes atrapados: un grupo de personas en el interior de una casa, de la que son incapaces de salir, y un estilita que, por voluntad propia en este caso, decide no bajar de una columna durante el resto de su vida.
El ciclo prosigue su marcha con un nuevo regreso, en este caso a Francia. Le Journal d’une femme de chambre (1963) marca el inicio de la colaboración de Buñuel con el guionista Jean-Claude Carrière, muy cercano a partir de entonces (con él incluso escribió sus muy recomendables memorias, Mi último suspiro), que en esta ocasión adapta la novela homónima de Octave Mirbeau que ya había llevado al cine Jean Renoir unos años antes.
Buñuel y Carrière trasladan a la gran pantalla a continuación Belle de Jour (1966), la novela de Joseph Kessel, con la colaboración inestimable de Catherine Deneuve como Sévérine, mujer burguesa aburrida de su vida rutinaria que comienza a llevar una doble vida.
La Voie Lactée (1969) cuenta el viaje de dos peregrinos desde París hasta Santiago de Compostela durante el que se encuentran con diversos personajes que permiten a Buñuel reflexionar y debatir con mucho humor sobre los dogmas del cristianismo, que, como siempre señaló, tanta influencia tuvo (a su pesar) en su vida y su obra: “Las dos experiencias que más han marcado mi vida, que más me han influido, son mi estancia con los jesuitas (la más grande limitación) y mi ingreso en el grupo surrealista (la libertad más grande). Mi vida se ha desarrollado a la sombra de este conflicto”.
Nueve años después de Viridiana, Buñuel vuelve a rodar a España Tristana (1970), adaptando de nuevo a Benito Pérez Galdós. Luego llegará una de las cumbres de su cine, Le Charme discret de la bourgeoisie (1972), premiada en todo el mundo, esa surrealista, divertidísima e inclasificable historia protagonizada por un grupo de pintorescos personajes que solo quieren cenar. Le Fantôme de la liberté (1974) es un fresco histórico sobre la libertad, el comunismo y la creación artística que se inicia con el asalto de las tropas napoleónicas a Toledo en 1808 y que llega hasta la actualidad (la de entonces).
El viaje retrospectivo por la obra del maestro de Calanda concluye en 1977 con Cet obscur objet du désir (1977), historia de amor y desamor a través de diversas ciudades europeas de Matthieu, caballero francés encarnado en Fernando Rey, y la española Conchita (interpretada al alimón por Carole Bouquet y Ángela Molina).
El ciclo se ha completado a lo largo de todo el año con un puñado de películas relacionadas (de muy diversas formas) con la obra de Buñuel. En otoño se podrán ver dentro de este espacio Buñuel + Plus cuatro títulos, empezando con Marquis (1989), de Henri Xhonneux, una aproximación animada al universo del Marqués de Sade. Y uno de los animadores europeos más importantes del siglo XX, Jan Švankmajer, visitará las pantallas de TBK este otoño con Los conspiradores del placer (Spiklenci slasti, 1996), insólita película (en esta ocasión en imagen real) sobre la fantasía y el placer.
Estos pluses concluirán en diciembre con la proyección de 4 (2005), ópera prima del cineasta ruso Ilya Khrzhanovsky, y The Love Witch (2016), elegante y divertida película sobre la brujería en clave feminista escrita, dirigida y producida por Anna Biller.
2021 ha sido sin duda un año Buñuel en TBK. La obra completa de uno de los grandes ha pasado por su pantalla grande y así será recordado.