Adiós entusiasmo, Vladimir Durán, Argentina-Colombia, 2017, 79’, DCP, VO:ESP
El director colombiano Vladimir Durán suele citar como referencia directa para este su primer largometraje una película bien conocida por nuestro público: El desencanto (1976), documental de Jaime Chávarri sobre la familia Panero. “Es lo que yo quería desarrollar: lógicas fuera de toda lógica y gente que piensa distinto al lugar común”.
Axel tiene diez años y vive con sus tres hermanas y su madre en un apartamento de Buenos Aires. Celebran cumpleaños, organizan obras de teatro, escuchan músicas antiguas, discuten y se pelean, invitan a amigos a reuniones, ven vídeos caseros en la televisión… Todo lo que cualquier familia podría hacer en su casa de pasillos largos e infinitas estancias. Pero hay algo extraño en todo esto: Margarita, la madre, vive encerrada en una habitación de la que nunca sale y a la que nadie puede entrar. Su voz sólo se oye a través de una ventanita que da al baño, pero esa presencia fantasmal y extrañísima será suficiente para que la matriarca dirija el día a día y el destino de su familia.
La película ganó el premio al Mejor Largometraje en la Competencia de Vanguardia y Género del Bafici, Festival de cine Independiente de Buenos Aires.
Primer largometraje del director Vladimir Durán, ganadora del premio Mejor Largometraje en la Competencia de Vanguardia y Género del Bafici, Festival de cine Independiente de Buenos Aires.