Esta es la única conferencia que Simone Weil (París, 1909 Ashford, 1943) imparte en vida, el 23 de febrero de 1937, frente a un público compuesto de obreros. La pensadora analiza en esta conferencia, con esa sensibilidad que la hace tan particular, las vicisitudes de un proceso de racionalización en el que mientras el cuerpo del trabajador es reducido a la condición de herramienta, los productos obtenidos en el proceso son a su vez combustibles para una máquina que no para de expandir su insatisfacción por la faz de la tierra.
Weil se niega a concebir la opresión que se ejerce sobre los obreros solamente en términos económicos y afirma en su texto: “El obrero no sufre solo por la insuficiencia de la paga. Sufre porque está relegado por la sociedad actual a un rango inferior, porque está reducido a una especie de servidumbre”.
Documentación
Esteban Zamora revive la única conferencia que Simone Weil impartió en vida, el 23 de febrero de 1937, frente a un público compuesto de obreros.