Jugar, jugar y jugar es un proyecto que se ha desarrollado en la escuela Samaniego de Tolosa, en el marco de la convocatoria Periferias escolares.
Este proyecto pedagógico, nace del deseo y la necesidad de la comunidad educativa (madres y padres, alumnado, profesorado) del centro. Se pusó el foco en el proceso (y no solo en el resultado), y desde el inicio se creó un grupo de trabajo (dirección, una educadora de Tabakalera, representantes de la ampa y distintas responsables de proyectos del centro) que en colaboración, diseñaron todos los pasos del desarrollo.
En todo momento, el alumnado fue el motor de las dinámicas llevadas a cabo a lo largo del año, y los y las protagonistas de las acciones de reflexión, investigación, diseño, toma de decisiones e intervención.
Tras observar los juegos, acciones y relaciones que se daban en el patio y los espacios comunes en los momentos de juego libre, los y las estudiantes de 2º y 3º de primaria desarrollaron proyectos para sumar juegos y nuevas acciones que echaban en falta.
Así, el grupo de tercero quiso sumar espacios donde esconderse, y para ello, junto con el equipo de Garaion Sorgingunea, trabajaron en la construcción de un laberinto de mimbre vivo.
Los estudiantes de cuarto, por su parte, buscaron vivencias relacionadas con el equilibro, y para ello construyeron y colocaron un slack-line, una tela de araña y hamacas en distintos puntos del patio.
Los de quinto curso diseñaron y construyeron tres modelos diferentes de circuitos. Y, por último, los estudiantes de sexto, junto a la artista Maitri Ugalde, diseñaron maquetas y transformaron tres espacios distintos de la escuela con el objetivo de tener un espacio donde estar tranquilos.
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