La exposición 'Estimulantes: circulación y euforia' tiene como objeto de estudio los estimulantes – tales como el café, el...
Esta exposición tiene como objeto de estudio los estimulantes – tales como el café, el azúcar, el cacao, el tabaco o el opio – cuya circulación fue activada a un nivel global a partir de los viajes de exploración transoceánica que cobran especial relevancia en el siglo XV. Estos flujos de intercambio de mercancías inauguran una época en la que la razón económica pasa a ser entendida como el fundamento para la vida colectiva.
La exposición Estimulantes: circulación y euforia presenta producciones de artistas elaboradas específicamente para el proyecto, junto con otras obras de arte y materiales provenientes de archivos y museos. También incluye distintos documentos generados durante el programa de conferencias, seminarios y talleres desarrollado en el bienio 2015 - 2016 en el Centro Internacional de Cultura Contemporánea Tabakalera.
Desconocidas en el mundo Europeo hasta el siglo XV, cuando comienzan su circulación transoceánica, sustancias como el café, el azúcar, el cacao o el opio se integran, en algunos casos inmediatamente, en otros gradualmente, en la vida cotidiana de los países europeos, en principio como productos de lujo y, más tarde, popularizados hasta generar unos hábitos de consumo que implican al conjunto de la sociedad.
A otra escala, el uso de los estimulantes crea en el organismo unas dinámicas con efectos similares a los movimientos de la circulación global; excitando y ampliando el campo de acción del cuerpo humano, y dando lugar a un sinfín de relaciones en las que las correspondencias entre deseo y voluntad, ebriedad y capitalismo o subjetividad y cosmovisión cobran una especial relevancia.
Se trata de un sistema de relaciones comparable al del sistema nervioso, cuyo análisis se podría llevar a cabo, tal y como propone esta exposición, completandolo con un tercer movimiento y cambio de escala; dando un salto desde ese plano interno y microscópico hacia un horizonte que supera la intervención humana, el de la circulación de las fuerzas que determinan la rotación planetaria y, con ello, la actividad en la tierra, el día y la noche, las estaciones del año o las mareas. Un plano que, a su vez, se configura como escenario para la búsqueda de sentido y la pregunta por la naturaleza de las cosas.
Comisario: Oier Etxeberria.
Comité asesor: Max Jorge Hinderer Cruz y Pablo Lafuente.
Artistas: Lorea Alfaro, Ibon Aranberri, Antonin Artaud, Erick Beltrán, Alice Creischer, Ines Doujak & John Barker, Patricia Gadea, Nicolás de Lekuona, Mark Lombardi, Maruja Mallo, Henri Michaux, Juan Luis Moraza, Otobong Nkanga, Jorge Oteiza, Fernando Palma, José Miguel Prada Poole y Santiago Ramón y Cajal, entre otros.